La opinión de Ellena Efimova

Rusia. Granada

Octubre 2014-Junio 2015

Ellena Efimova

Ellena Efimova

Granada es una ciudad que me impresionó la primera vez y sigue siendo para mí un lugar con un ambiente especial

A lo mejor la mayor parte de la gente que viene a conocerla se queda con recuerdos de grandes monumentos, pero yo no veo la imagen igual que ellos.No me gusta tener prisa en mis viajes ni lugares demasiado popularizados. Prefiero observar y aspirar la atmósfera de un lugar, por ejemplo, caminando por las calles hasta que me duelan los pies o sentada en una playa bonita disfrutando del aroma del mar y recordándolo para toda la vida.

Y un detalle que llegó a ser para mí uno más de estos momentos especiales fue una visita a una churrería pequeña y con un aspecto bastante humilde en el centro de la ciudad. Viajaba entonces con un amigo y no tenía ni idea de lo que es este magnífico invento de la humanidad: churros.

Recuerdo entrar en la cafetería por curiosidad y por tener ganas de tomar chocolate caliente. Nos sentamos a la mesa (el local era tan estrecho que parecía más un pasillo y apenas se podía pasar) y pedimos chocolate, té verde, zumo de naranja y, naturalmente, churros.

La muchacha que nos atendía especificó cuantas porciones queríamos y cuando dijimos dos, nos miró como a unos locos. Nos volvió a preguntar un par de veces más y al recibir una respuesta clarísima, se retiró.

Al cabo de un rato, nos trajo las bebidas y cuando en algún momento por fin aparté la vista de mi taza de té, la vi acercarse con dos platos llenos a tope de una sustancia que se suponía tener que ser churros.

Y yo, como una vieja golosa, no pude no apreciarlos. Eran largos, gordos y maravillosamente dorados. ¡Podría dar definiciones empezando por cualquier letra del alfabeto! Los estuvimos comiendo los dos, mi amigo y yo, pero no pudimos acabarlos.

Este aroma de aceite y el sabor precioso de churros acompañados de chocolate siempre quedarán como una de mis principales asociaciones en Granada. Especialmente debido a que cuando fui a Cataluña y descubrí como eran los churros de allí (muy modestos en realidad), aprecié otra vez la generosidad de Granada.

  • Katie Obrien - Bristol, Reino Unido. Alicante
  • Martyn Yeoman - North Yorkshire, Reino Unido. Alicante
  • Verena Latschbacher  - Austria. Alicante
  • Petr Štěpánek - Rychnov nad Kneznou, República Checa. Granada
  • Taeko - Japon. Alicante
  • Yuko - Japón. Alicante
  • Sara Rall - Longlevens, Reino Unido. Granada
  • Richard Goedegebuur - Bergen op Zoom - The Netherlands. Granada
  • Isa Boulianne - Canada. Granada
  • Carla Rathjen - Alemania. Granada
  • Christina Berg Fabini - Roeyse - Noruega. Granada
  • Anne Uijtdewillegen - Amsterdam. Alicante
  • Amine Sabar - Marruecos. Alicante
  • Ana - IRÁN. Alicante
  • Zahira Hadak - Alemania - Aachen. Alicante
  • Marlene Roider - Austria - Graz. Alicante
  • Tatyana Martynova - Rusia - Novosibirsk. Alicante
  • Yevheniia Bordovska - Ucrania  - Kiev. Alicante
  • Leonie van Alst - Países Bajos - Utrecht. Alicante
  • Laëtitia Beau - Francia - Paris. Alicante
  • Mehmet Atalay Ilkyol - Turquía - Istanbul. Alicante
  • Marie Hermanns - Alemania. Granada
  • Simon Hausknecht - Australia- Perth. Alicante
  • Tibor Máté - Hungría- Budapest. Alicante
  • Nicholas Maggio - Estados Unidos- Nueva Orleans. Alicante
  • Olga Kaplina - Rusia. Alicante
  • Yvonne Jilek - Austria. Granada
  • Monika Königer - Croata. Granada
  • Federica Russo - Italia. Granada
  • Mette Elise Kvalvik - Noruega- Skudeneshavn. Alicante